«Estoy muy contento porque existe esta capacitación en Neuquén, un curso de joyería gratuito con salida laboral creado por el Centro de Formación Profesional (CFP), con título oficial. Queremos que los alumnos puedan tener la mejor experiencia de aprendizaje educativo sobre la joyería», destacó el orfebre Gustavo Nawel, docente del curso, durante la entrevista en Manos de Artesano.
«Cuando yo comencé también lo hice en un CFP de forma gratuita, fue el acercamiento que me permitió aprender lo que es mi oficio hoy. Y replicar este gran aprendizaje que tuve al resto de la comunidad me llena de felicidad», aseguró el artesano.
Sobre los recursos para desarrollar la capacitación señaló que desde la institución apuntan a «que cada alumno pueda tener sus propias herramientas y materiales para poder trabajar de manera óptima en la escuela». En mayo comienza el primer módulo: Iniciación a la joyería.
Escuchá el audio de la entrevista (Programa del 25 de abril de 2016):
Gabriela Aldezabal teje desde muy chica, en dos agujas y crochet. Trabaja con algodón y lana de oveja pura, utiliza pigmentos naturales que prepara junto a su marido, Daniel Cifala, y como cierre de sus prendas también producen su propia botonería. Viven y tienen su taller en la ciudad de Mar del Plata, donde existe una tradición de tejido muy grande.
«La gente sigue valorando el trabajo a mano… Si uno quiere abrigarse se pone un suéter tejido a máquina y listo, pero tiene otro valor ponerse una prenda hecha a mano. Trabajamos con materiales nobles, el tejido es noble como muchas otras artesanías», destacó Gabriela durante la entrevista con Manos de Artesan@.
Para los tintes utilizan cochinilla, cebolla, nogal, algarrobo. «Mordento con agua de mar, a parte de los mordentes que uso que son alumbre y cremor tártaro. Lo básico también es macerar las cosas durante varios meses. El proceso del teñido es largo pero el resultado es óptimo, no se destiñe más porque son colores tierra. Cuando los ves te das cuenta, no son colores sintéticos de tinturas compradas. Lo que nos diferencia es trabajar con productos de la tierra que son muy nobles», aseguró la artesana.
«Mis diseños son bastante clásicos, algo para llevar, que se puede combinar. Antes dibujaba un poco pero ahora casi nada. Con los años vas adquiriendo experiencia con los talles», dijo Gabriela.
Con respeto a la botonería, Daniel contó que trabaja con materiales orgánicos, naturales, utiliza madera, cañas, huesos, cardón. «Es una botonería hecha a mano, pieza por pieza. El botón es la parte final del proceso y cada prenda requiere algo especial según el tamaño, la cantidad, los colores y materiales. Hay prendas que quedan mejor con determinados materiales que con otros y hay que buscar esa combinación».
Se preparan los alfareros y ceramistas de todo el país para encontrarse en San Carlos, provincia de Salta, en una nueva edición del Barro Calchaquí a realizarse del 11 al 16 de julio. En Manos de Artesano entrevistamos al ceramista Gastón Contreras, uno de los organizadores, para conocer los detalles del evento.
San Carlos es un lugar rodeado de cerros y montañas, donde hay muchas canteras de arcilla. Es por eso que, en la zona, viven pueblos alfareros tradicionales con estilos muy propios del lugar. El Barro Calchaquí busca mostrar la forma de producción de la zona y también tiene como meta reunir a alfareros de distintas partes del país, con sus distintas maneras de producir. “El objetivo es que convivan todos los aspectos del oficio: lo que se produce a nivel artístico o educacional en otros lugares y la forma de producir con sabiduría que se transmite de generación en generación”, explicó el artesano y destacó que se trata de un evento autogestivo, sustentado por los propios alfareros.
Las actividades se llevarán adelante en la plaza 4 de noviembre de San Carlos. Se seleccionarán 30 ceramistas para participar de las jornadas de trabajo a la vista del público. Cada uno producirá una obra inspirada en la cultura popular norteña. Hay tiempo hasta el 20 de mayo para inscribirse. Ver bases
Obras del Barro Calchaquí 2012
Ya está confirmada la presencia de alfareros provenientes de Buenos Aires, Córdoba, Misiones, Jujuy, Santa Fe y hasta de Uruguay. Desde la organización invitaron a un grupo de alfareros de Casira, una localidad de la Puna de Jujuy, los cuales mostrarán la excelencia de su forma de construcción y la especificidad del tipo de arcilla que utilizan. Ellos van a hacer demostración de construcción de distintos tipos de ollas. También estarán presentes las integrantes de una cooperativa de alfareras de San Antonio de los Cobres, que van a llegar con su propio barro. Ambos grupos van a hacer su horneada tradicional con guano, acomodando las piezas con su forma particular.
Sección especial de Manos de Artesano. Salimos del estudio de radio para charlar con los autores en su lugar de creación. Sol Riera entrevistó al ceramista Emilio Villafañe en su taller de San Cristobal, en la ciudad de Buenos Aires.
Emilio es profesor de cerámica desde 1974. Hace 40 años que se desempeña como rector y docente del Instituto Municipal de Cerámica de Avellaneda. A fin de este año se jubila después de, según sus propias palabras, «haber dado todo lo que podía dar».
Realizó distintas asistencias técnicas en escuelas, talleres e institutos de artes visuales y de cerámica a lo largo del país y en ámbitos internacionales. Ha participado de múltiples exposiciones tanto individuales como colectivas. En su extensa carrera ha cosechado numerosos premios y distinciones.
Además de ceramista es padre, abuelo, esposo, amigo, colega y por sobre todas las cosas es docente. Ama la docencia, se le nota en cada palabra, en cada gesto. Le gusta enseñar, disfruta transmitiendo conocimientos pero no solo de cerámica. Enseña sobre la vida, genera conciencia social en sus alumnos. Él ama enseñar porque sabe que de esa forma puede ayudar a la comunidad en la que esta inmerso, puede ayudar a los pibes que van a la escuela a que puedan modelar un mejor futuro.
Ceramista, músico, viajero, autodidacta. Oriundo de Granadero Baigorria, una ciudad «pegadita a Rosario hacia el lado norte», volcada sobre río. «Vivo a 200 metros del río. Hemos crecido en el río, viajando a la isla todo el tiempo», cuenta Gabriel Cepeda durante la charla con Manos de Artesano. Como se dice, le sacamos el jugo a este gran maestro. Un placer escucharlo. Hicimos un recorrido por su carrera con el barro, con la música, sus viajes, sus investigaciones. También hablamos sobre el proyecto colectivo Pieza Única; su pasó por la función pública siendo muy joven del que dejó un legado para su ciudad: la Casa de la Cultura; su rol como capacitador y su pasión por enseñar lo que ha aprendido -y sigue aprendiendo- en estos 35 años de carrera.
«Tengo un camino divido en dos lenguajes que trato de unificar: la música y la artesanía… En el caso de la artesanía he visitado muchos países emblemáticos dónde se podía aprender realmente los secretos de la cerámica: islas en el Caribe, lugares en la selva mexicana , en todo el territorio argentino especialmente en el norte. Uno va a prendiendo las técnicas del barro, sus secretos y los secretos de los pueblos… Hace muchos años me especialicé en la alfarería del Litoral».
Audio sobre su carrera
Proviene de una familia de músicos. «Mi papá era cantante de orquesta de tango. Con mi hermano (Alejandro) nos hemos criado en un ambiente musical», relata Gabriel. Empezaron a cantar para la familia siendo adolescentes. En el año 78 fue la primera vez que cantaron en público, en Cosquín. Recuerda que fue en la sala de empleados de comercio en un recital de rock. «Ahí comienza la mirada de poner un poco las cosas en serio, de cantar de verdad». Unos años después, en 1985, ganaron el Festival de Cosquín. «Lo nuestro siempre fue la canción de autor, con la temática del sonido de la música latinoamericana y con repertorio propio».
Imagen del Simposio de Cerámica de Avellaneda
«El tema Soy artesano lo compuse desde adentro. Fue cortina musical de muchas ferias, incluso en España. En 2012 fue declarada canción oficial de la Feria de Artesanías de Cosquín. La cantamos con Ale en la inauguración… Mis colegas siempre me piden que la cante; espero que la canción les llegue y la sientan como propia».
Audio sobre su faceta como músico
Integra el grupo de artesanos/as que organizó la muestraPieza Única. Obras de autor, en La Falda. «Fue el resultado de muchas charlas entre compañeros. Esta experiencia nos ratificó que debemos trabajar en comunidad, en proyectos colectivos con los artesanos para que esto se vuelva a repetir y se multiplique en todo el país».
Audio sobre la muestra Pieza Única
Gabriel tuvo su paso por la función pública como director de la Casa de la Cultura de la Ciudad de Granadero Baigorria, lugar que lleva su nombre. Estuvo un año y medio y luego volvió a la cerámica porque «no se puede estar mucho tiempo sin modelar el barro y sin cantar».
Audio sobre su participación en la Casa de la Cultura
También habló sobre su labor como capacitador en diferentes talleres, comunidades y programas especiales de rescate de técnicas.
Cesar Merhe y Andrea Marega son compañeros de vida y de oficio, viven en las sierras de Bialet Massé, Córdoba, donde llevan adelante su taller de cuchillería forjada a mano. Sus comienzos tiene que ver con la experimentación. César cuenta que siempre le interesaron los cuchillos y siempre le gustó hacer cosas, «como a veces no tenía el dinero para comprarme lo que quería, lo fabricaba». Luego, empezó el camino de la investigación, el aprendizaje y fueron adquiriendo y mejorando las técnicas para realizar objetos cada vez más elaborados.
Realizan íntegramente cada cuchillo. El proceso comienza con una pieza de acero, por ejemplo en forma de barra o fleje, a la que le van dando forma. Andrea se encarga de cabos, vainas y grabados al ácido. César hace toda la parte de forja, el trabajo del metal. “Calentamos el metal con una fragua y mediante martillos, con el yunque y la bigornia le vamos dando forma. Luego se templa la hoja y se le hace un revenido y el pulido”, detalla el artesano.
Imáganes de Danian Varia.
«Todos nuestros cuchillos tienen una interpretación histórica. Nosotros le dejamos la marca de la fragua, del forjado, para que se note bien que la hoja está hecha a mano… Hacemos muchas dagas, este año llevamos a la feria de Cosquín una catana y el año pasado una lanza», detalla Andrea. Para los cabos utilizan maderas nacionales duras y semiduras, asta de ciervo y, recientemente, han incorporado asta de vaca.
También son capacitadores. «Nos gusta mucho trasmitir principalmente porque cuando uno enseña también aprende mucho de sus alumnos”, afirman. Además, han participado en el proyecto de recuperación de técnicas tradicionales a través del Fondo Nacional de las Artes (FNA) dictando talleres en Cafayate y en la ciudad de Salta.
Stand Feria de Artesanías de Cosquín 2016
Con el tiempo han logrado identificar los lugares y los públicos para sus productos y «donde no nos desgastamos tanto», acota Andrea. Considerando también que el ir a las ferias implica para ellos que el taller se para. «Lo nuestro no hay forma de terminarlo ni elaborarlo en la feria». En el circuito que tienen armado, viajan un vez por mes. Comienzan el año en Cosquín, en la Feria Cortazar donde los entrevistamos. También viajan con frecuencia a Mendoza: se presentan en la Plaza Independencia y en Chacras de Coria, esta última en agosto. Y recorren ferias privadas de cuchillería en Buenos Aires como la MAC.
Durante la Semana Santa pasada, Andrea y César participaron en el Edén Hotel de La Falda (Córdoba) de la primera muestra «Pieza Única. Obras de Autor», un proyecto autogestivo de un grupo de artesanos/as y artistas que surgió con el objetivo de generar nuevos espacios de comercialización para sus piezas. Algunas fotos que publicamos aquí pertenecen a dicho evento y fueron tomadas por el artesano Damián Varia, uno de los integrantes de Pieza Única.
“El feedback con el público es imprescindible ya que en el taller podés hacer diseños, dibujos, que por ahí están muy buenos pero está muy buena también la devolución de la gente… Todo lo que es cuchillería generalmente está rodeado de un mito, un halo de hermetismo. Antiguamente, los artesanos tenían sus secretos y no revelaban algunas cosas. Nuestra idea es transmitir todo lo que podamos al público. Eso le da más valor a nuestro trabajo. Nuestro interés también es ese, que se pueda valorar una pieza que estuvimos trabajando muchas horas».
Compartimos la página de Facebook de Andrea y César.
Escuchá la nota completa (Programa del 28 de marzo de 2016):
Manos de Artesano 